martes, 17 de marzo de 2009

Bravo

“Lo que hace el Barça es lo más parecido al arte”, dijo hace pocos días su presidente, Joan Laporta. Y es que los dirigentes de nuestro fútbol siempre han destacado más por sus bravuconadas y sus salidas de tono que por gestionar los clubes que presiden.
Pero volviendo a lo del arte, hay que reconocer que el fútbol que practica el Barça es preciosista, atrevido y hasta cierto punto vanguardista. Y eso encandila al aficionado.
Al aficionado al balompié le apasiona el fútbol total, ese fútbol que sólo mira la portería contraria y que tiene en la pelota a su mejor defensa. Su posesión es la respuesta ante las ofensivas del contrincante, que termina rindiéndose exhausto tras correr, correr y correr persiguiendo ese objeto de deseo que tanto da y quita en el fútbol. Con el balón en los pies comienzan a surgir las combinaciones, las paredes, los pases al hueco y el gol. Les suena, ¿verdad?

Y precisamente ahí surge la exigencia. La responsabilidad y la presión de que sólo haciendo lo que uno sabe puede triunfar ha sido una losa con la que históricamente ha cargado el Barça. Sobre todo desde la llegada de Cruyff (como jugador), e incluso ya desde la época de Kubala. Pero esa losa es del todo admirable. Encantadora, en un fútbol demasiado preocupado por los sistemas tácticos, las jugadas de estrategias y las defensas que se imponen a los ataques.

El estilo ‘Barça’ se ha ido perfeccionando en busca de ese fútbol total que siempre abanderó Cruyff. Después de él, sus compatriotas Van Gaal o Rijkaard siguieron sus pasos y conocieron lo que el Barça y su estilo acarrea. Pero ha sido Pep Guardiola, el noi de Santpedor, quien mejor ha sabido escenificar el arte.

Esas señas de identidad, que Guardiola conoce tan bien, han sido exprimidas por el técnico catalán al máximo. Y los resultados son inmejorables, al igual que las expectativas. Unas expectativas que apoyadas en un fútbol veloz, vertical, fluido y comprometido han elevado a los de Guardiola como aspirante a todo.

Y eso también pesa. Pesa un estilo que lo lleva hasta unos límites de exigencia que en ocasiones lo han acabado devorando. Parece, como si el Barça no supiera ganar, jugar o competir de otra forma. Con el balón como aliado y compañero fiel, la posesión como excusa y el gol como único fin. Puede parecer también, viendo los partidos del Barça esta temporada, que ese fútbol es fácil, simple o sencillo. Pero no. El grado de concentración y de desgaste tanto físico como psíquico es elevadísimo, tanto que cuando no se da el 100% se pierden partidos, ligas y hasta el rumbo.

Algo de eso sabe Guardiola y muchos otros de los que hoy visten la camiseta del Barça. Ellos, que han paladeado las mieles de su estilo y la voracidad del mismo cuando han desafinado en ese canto al fútbol en que el Barça convierte cada partido. De pequeño oí muchas veces que en Barcelona lo primero es jugar bien y luego ganar. Quizás ésa sea otra de las señas que ayuden a entender un club que es más que un club. Quizás no ganen un título o lo ganen todo. Quizás no sea arte, más bien un estilo, una forma de vivir y entender el fútbol, que como tantas otras cosas marca tendencias. Por el bien de este deporte que así sea.


Emmanuel Ramiro / Fifa-champions.com



http://www.fifa-champions.com/index.php?option=com_content&task=view&id=2041&Itemid=62

lunes, 9 de marzo de 2009

Habladores


Son las portadas, reportajes y columnas como las del diario As que me hacen sentir un tremendo dolor del estomago por el coraje que tan sólo con leer los titulares me causa. Entiendo que tengan muy marcado el equipo al cual apoyan, son practicamente sus voceros. Lo que no tolero son las portadas y declaraciones como las del diario Marca cuyo tiraje es de los más altos en España y esto ocasiona que una diario deportivo tan leído como este influya drásticamente en la opinión pública que se ejerce hacia determinado tema. Recordemos la campaña anti-Ramón Calderón del diario que se atrevió a publicar nombre y foto de distintos participantes y/o actores de la tan sonada novela en la presidencia del Real Madrid.

A eso le sumamos el bombardeo tan fuerte que se dio en el caso CR7, que para desfortuna de ellos no se concretaron las cosas (de momento). Y cómo podemos olvidar el constante bombardeo hacia el Barça que por perder en 2 partidos de liga consecutivamente ya comienzan a hacer sonar las alarmas, alegando que se trata de una crisis, y que el vestuario se encuentra totalmente roto y dividido. Son noticias como estas las que me causan un tremendo dolor de cabeza, por la tremenda alteración y hasta amarillismo que esta presenta.

En un momento como este en víspera de los partidos de vuelta de los octavos de la 'Champions' nos encontramos con que Marca hace creerle a sus lectores firmemente en que el Madrid dará la remontada ante los Reds, lo que jamás toman en cuenta fueron las declaraciones del presidente del momento Boluda cuando declaró que el Bernabéu gritaría 3 goles a favor de los merengues.

Y claro, no podemos olvidar lo que se menciona acerca del Barcelona-Lyon, donde mencionan que los franceses darán la sorpresa dejando a la escuadra catalana fuera de esta competición europea, demostrando única y exclusivamente su clara desesperación y frustración al saber que en cosa de unas horas quedarán eliminados de otra competición mientras que su archi-rival todavía se encuentra en las 3 que se disputan y con altas espectativas.